Investigadores diseñan nanopartículas esféricas recubiertas para administrar los fármacos oncológicos justo en el centro de las células tumorales
Gracias a la ingeniería biomédica es posible atacar las células tumorales desde dentro. Se trata, según explica un artículo de la revista «Nature Communications» de emplear lo que se llama la «molécula de la energía», la adenosina-5'- trifosfato (ATP) para desencadenar la liberación de fármacos contra el cáncer directamente en las células cancerosas y, los primeros análisis en el laboratorio muestran que aumenta la eficacia de fármacos dirigidos contra el cáncer de mama. La técnica ha sido desarrollada por investigadores de la Universidad Estatal de Carolina del Norte y la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill, EE.UU.
Es lo que los expertos llaman una «prueba de concepto». Hemos demostrado, señala el coordinador del trabajo, Zhen Gu, «que ahora disponemos de una nueva herramienta para la introducción de fármacos contra el cáncer directamente a las células tumorales, que podrá hacer que los tratamientos sean mucho más eficaces».
Lo que han hechon los científicos es desarrollar nanopartículas esféricas recubiertas con una cubierta que incorporan el ácido hialurónico (HA), que interactúa con las proteínas que se encuentran en la superficie de algunas células cancerosas. Y, cuando una célula cancerosa específica entra encontacto con el HA, la célula absorbe toda la nanopartícula. Así, una vez dentro de la célula cancerosa, el caparazón de la nanopartícula se separa y libera su carga útil: es decir, una colección de moléculas complejas de ADN que tienen incrustadas un medicamento para el cáncer llamado, la doxorrubicina, que se dirige directamente al núcleo de la célula cancerosa.
Explica Gu en el artículo que las moléculas de ADN están diseñadas para desarrollarse y liberar el fármaco únicamente cuando entran en contactocon altos niveles de ATP. Los altos niveles de ATP, que actúen como un «detonador» normalmente sólo se encuentran en el interior de una célula, lo que significa que el fármaco se libera a muy corta distancia del núcleo, y no fuera de la célula.
«Es la primera vez que se ha utilizado ATP como un ‘detonador molecular’ para la liberación controlada de fármacos contra el cáncer, tanto in vitro como in vivo», destaca otro de los autores del trabajo, Ran Mo. En las pruebas in vitro, la nueva técnica era 3,6 veces más eficaz contra un tipo de células de cáncer de mama humano.
Pero además los investigadores han probado la nueva técnica en un modelo in vivo, en in modelo de ratones con cáncer de mama. Y los resultados muestran que la técnica de ATP era más eficaz en la inhibición de crecimiento del tumor en comparación con otras técnicas.